Su pasión por el deporte y la atención psicosocial la llevaron a convertirse en una lideresa juvenil de Ciudad Bolívar, Bogotá.
Somos Jóvenes Resilientes, un #EfectoColectivo que sigue avanzando para apoyar y resaltar a los jóvenes que día a día trabajan por sus proyectos de vida y por sus comunidades y territorios. En Bogotá estamos en los barrios Caracolí y Potosí de la localidad Ciudad Bolívar, y allí conocimos a Natalia Giraldo, una psicóloga y deportista que trabaja e inspira a su comunidad.
Natalia Giraldo es una lideresa juvenil de 24 años que trabaja por la juventud de la localidad de Ciudad Bolívar, en Bogotá. Vive en el barrio Caracolí y participa en el Programa Jóvenes Resilientes #EfectoColectivo, de USAID y ACDI/VOCA, iniciativa que busca apoyar a los jóvenes en el acceso a oportunidades de formación, generación de ingreso económico, emprendimiento, acompañamiento psicosocial y uso del tiempo libre.
Desde que Natalia estaba en el colegio tenía sus pasiones definidas. El deporte fue uno de sus primeros amores pero, al sufrir asma, estuvo a punto de abandonarlo. Luego de unos años de confianza y atención médica, Natalia empezó a practicar porrismo cuando estaba en noveno de bachillerato. Inspirada en la disciplina, en la pasión deportiva y en la consciencia de su comunidad, en el 2014 Natalia abrió la Fundación Cristiana Joshua con su profesor de porrismo, Fabián Vargas, y junto a otros jóvenes de la comunidad.
“El objetivo de nuestra fundación es que más allá de crear una oferta de uso de tiempo libre para los jóvenes, también es fomentar la disciplina, el desarrollo de habilidades y del liderazgo, y también la generación de caminos alternativos a lo que comúnmente se ve en el barrio: grupos ilegales y microtráfico”, comenta Natalia Giraldo. La fundación empezó a ser parte de programas del IDRD y trabajaba con niños y jóvenes al dictarles prácticas de gimnasia, parkour, break dance, circo y malabares.
Desde el 2015, la fundación Joshua trabajó en barrios como Cazucá, Sierra Morena, Santo Domingo, La Estancia, La Estrella, Pesquilla, Nueva Colombia, Divino Niño y San Joaquín. Sin embargo, por problemas financieros, tuvieron que cerrar la fundación en el 2016.
“En los primeros años habíamos trabajado con un niño que lidiaba con una discapacidad en sus ojos y sabíamos que sufría problemas en su hogar. Desafortunadamente su madre murió por una enfermedad, y cuando la Fundación estaba cerrada, el niño intentó buscarnos, pero luego se suicidó. Esa experiencia nos cambió la vida y volvimos a abrir; como él, muchos niños y jóvenes necesitan apoyo”, afirma Natalia. Desde entonces, la fundación sigue en funcionamiento, ahora añadiendo en sus clases las artes marciales, boxeo y la atención psicosocial.
En el 2019 Natalia se graduó de la Universidad Minuto de Dios como psicóloga y, desde su profesión, sigue liderando y apoyando a los procesos comunitarios y juveniles de Ciudad Bolívar. Actualmente está cursando una maestría con doble titulación en psicología clínica y psicología de la salud en la Universidad Internacional Iberoamericana y en la Universidad Europea del Atlántico.
Natalia Giraldo pretende seguir trabajando desde su profesión y desde su fundación por los jóvenes de Ciudad Bolívar, y también espera que, con el apoyo del Programa Jóvenes Resilientes #EfectoColectivo, la población juvenil de su territorio acceda a más oportunidades y así se conviertan en roles de cambio positivo en la comunidad.
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